A música e o movemento en “La elegancia del erizo”

A pouco adolescente Paloma xa nos ten acostumados ás súa ideas profundas, que, espalladas por todo o libro comparten protagonismo cos “diarios do movemento do mundo”. Estes  tamén os escribe ela. O ritmo e o movemento “vertebran” o discurso de Paloma que se intercala coa narración da señora Michel.

Vexamos como  comeza (na historia) o gusto de Paloma polo movemento e que ritmos imos ir escoitando na nosa lectura.

“(…) Se me hizo la luz cuando los del equipo neozelandés empezaron su haka. Entre ellos había un jaugador maorí muy alto y muy joven. Era éste el que había atraído mi atención desde el principio, sin duda por su estatura primero, y luego también por su manera de moverse. Un tipo de movimiento muy curioso, muy fluido pero sobre todo muy concentrado, quiero decir muy concentrado en sí mismo (…), mientras que los gestos de los demás se dirigían hacia sus adversarios y hacia todo el estadio que los estaba mirando, los gestos de este jugador permanecían en él, estaban cocentrados en él mismo, y ello le confería una presencia y una intensidad increíbles. Y como consecuencia de ello, el haka, que es un canto guerrero, adquiría toda su fuerza. Lo que hace la fuerza del soldado no es la energía que emplea en intimidar a su adversario enviándole un montón de señales, sino la fuerza que es capaz  de concentrar en sí mismo, centrándose en sí, sin salir de sí mismo (…)!

Páxinas 37 e 38

 

“(…) Por lo general, por las mañanas siempre saco un ratito para escuchar música en mi cuarto. La música desempeña una función muy importante en mi  vida. Es lo que me permite soportar … pues… todo lo que hay que soportar: mi hermana, mi madre, el colegio, Achille Grand_ Fernet, etc. La música no es solo un placer para el oído como la gastronomía lo es para el paladar, o la pintura, para los ojos. Si pongo música por la mañana tampoco es que sea muy original: lo hago porque determina el tono del día (…)

Por ejemplo, para relajarme pongo algo que haga alcanzar un estado de ánimo distanciado en el que las cosas no me llegan de verdad, las miro como quien ve una película: un estrato de consciencia “desapegado”. En general, para este estado escucho jazz o, más eficaz a  largo plazo aunque tarden más en notarse los efectos, Dire Straits (viva el mp3)

                  Dire Straits  “Sultans of Swing “

Esta mañana he escuchado a Glenn Miller antes de salir para el colegio(…)

Páxinas 170 e 171

    Genn Miller, “In the mood”

“(…) La razón del éxito del coro es el propio señor Trianon. Es joven, guapo y manda cantar tanto viejas joyas del jazz, como los últimos hits de moda, orquestados, eso sí, con mucha clase(…)

Páx. 203

Vella alfaia do jazz feminino, Ella Fitzgerald

Coñecidas as musicais mañáns de Paloma, imos ver o que escoitaba a señora Michel:

 

“(…) Y que de la portería provengan notas de Mahler (…)

Páx. 16

  “Adagietto da 5ª sinfonía de Mahler na interpretación da New Philharmonia Orchestra dirixida por Sir John Barbirolli, as imaxes son de Muerte en Venecia

( obra da que falamos aquí)

E, pola súa vexiga pequena, recoñece a Mozart:

“(…) En ese momento me convenzo ya del todo de haberme vuelto loca o de haber llegado al cielo, porque el sonido hasta entonces indestinguible se precisa e, impensable pero cierto, se asemeja a una pieza de Mozart.

Para quien quiera detalles, al Confutatis del Réquiem de Mozart*.

Confutatis maledictis, Flammis acribus addictis!, modulan unas bellísimas voces líricas.

Me he vuelto loca (…)

La puerta se abre.

El Confutatis se detiene al instante. Una deliciosa ducha de silencio inunda mi cuerpo (…)

Páxinas 246 e 247

Wolfgang Amadeus Mozart,Réquiem,Symphonieorchester des Bayerischen Rundfunks
Confutatis (coro).
Lacrimosa (coro)

Ademais de a Mozart, tamén recoñece a Purcell:

“(…) Caigo entonces en la cuenta de que hay música.

No está muy alta y emana de unos altavoces invisibles que difunden el sonido por toda la cocina.

Thy hand, lovest soul, darkness shades me,

on thy bosom let me rest.

When I am laid in earth

may my wrong create

no trouble in thy breast.

Remember me, remember me,

but ah! forget my fate.

Es la muerte de Dido, en la ópera de Dido y Eneas de Purcell. Si quieren mi opinión: la obra de canto más bella del mundo. No sólo es bella, es sublime, y lo es por un encadenamiento increíblemente desnso de loss onidos, como si los ligara una fuerza invisible y como si, a la vez que se distinguen, se fundieran los unos con los otros, en la frontera de la voz humana, casi en el territorio ya del lamento animal, pero con una belleza que no alcanzarán jamás los gritos de los animales, una belleza que nace de la subversión de la articulación fonética y de la transgresión del empeño que suele poner el lenguaje verbal en distinguir los sonidos.

(Procedencia da imaxe)

    “A morte de Dido” , de Cayot, exposta no museo do Louvre

Quebrar los pasos, fundir los sonidos.

El Arte es la vida, pero con otro ritmo (…)

Páxinas 308 e 309

O lamento de Dido

Ou a Eminen:

“(…) Tum tum tum tum tum tum tum

Look, if you had one shot, or one opportunity,

To seize everything you ever wanted.

One moment
Would you capture it or just let it slip?

Esto es de Eminem. Confieso que, a título de profeta de las elites modernas, a veces lo escucho cuando ya no me es posible ignorar que Dido ha perecido (…)”

Páxina 347

“Lose Yourself”, Eminem

E esta é a última música que sona na novela:

                                    Algo cásico, de Satie, ao piano

“(…) Bueno, el caso es que hemos bajado a la portería Kakuro y yo. Pero, al cruzar el patio, nos hemos parado en seco los dos a la vez; alguien se había puesto a tocar el piano y se oía muy bien lo que tocaba. Era algo de Satie, creo, bueno, no estoy segura (pero en todo caso) era algo clásico (…)

Páxina 364

* A propósito de Mozart, na biblioteca podedes atopar El síndrome de Mozart, de Gonzalo Moure. Tamén tedes a película Amadeus:

“Mozart e Salieri  compoñendo o Réquiem”

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