“El telegrama había sido escrito después de los siguientes acontecimientos: el 9 de octubre, en el puerto de Suez, el cónsul del Reino Unido y Fix, el detective inglés enviado a buscar al ladrón del Banco de Inglaterra, esperaban la llegada del vapor Mongolia. Fix había recibido la filiación del presunto autor del robo y estaba seguro de que lo encontraría a bordo del barco.
Cuando el Mongolia llegó, el detective miró con atención a todos los que desembarcaban. Uno de ellos se le acercó por casualidad y le preguntó dónde quedaba el despacho del cónsul. Fix se fijó en el pasaporte del viajero y se dio cuenta de que los datos del documento coincidían con la filiación que había recibido de la policía.
“¿Es suyo el pasaporte?, preguntó Fix.
“Es de mi amo, pero él ha preferido quedarse a bordo.”
(Fragmento de “La vuelta al mundo en 80 días” , edición abreviada da editorialSol90. Con ilustracións de Fabián Mezquita)